tag:blogger.com,1999:blog-4998215284687496747.post2644874983801314571..comments2022-11-15T01:44:59.903-08:00Comments on A vos no te creo: Defensa de la cotidianeidadPelelehttp://www.blogger.com/profile/08703319863026108296noreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-4998215284687496747.post-59881936972218346602008-10-14T18:39:00.000-07:002008-10-14T18:39:00.000-07:00A ver muchachos para terciar con gusto..... a lo q...A ver muchachos para terciar con gusto..... a lo que apunta el Pelele, me le sumo, pero creo que los conceptos de ciudadano y consumidor no son excluyentes en absoluto, creo que si le jalamos el rabo al cuento nos damos cuenta que los espacios públicos surgen como una necesidad ciudadana, entiéndase en el siglo XVIII, promovida justamente por la burguesía (Chartier). De ahí que las grandes ciudades sean espacios de consumo, precisamente para esa burguesía que las construyó. Lo que pasó con San José (hipótesis), es que esa burguesía-ciudadana se quedó en la periferia como apunta P. entonces tenemos una ciudad "tomada" por los excluídos, o más bien por quienes apuntan a un consumo popular. Otra cosa es que para que Chepe siga siéndolo, dejemos putas, borrachos y mendigos, puesto que ahí radica la "cotidianeidad" que señala Jenaro. En todo caso estas trascendentales preguntas se están resolviendo políticamente, sin tomarnos parecer, quizá porque como dijo P. somos unos turistas en una ciudad que queremos querer.C.A. Fallashttps://www.blogger.com/profile/16075921515961022362noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-4998215284687496747.post-49632913487170805532008-10-14T16:39:00.000-07:002008-10-14T16:39:00.000-07:00Estoy de acuerdo y no sé si tu prpoósito era ese. ...Estoy de acuerdo y no sé si tu prpoósito era ese. De cualquier manera, coincido con vos, especialmente, en eso de que no somos nosotros quiénes construimos esa cotidianeidad que, según yo, debemos defender. Lo que yo creo que debemos defender no es una cotidianeidad dada positivamente así por que sí. Por el contrario, odiando la cotidianeidad esa que gozamos (aunuqe sea a veces y aunque yo sea de Cartago) es cómo podemos "imaginar" una cotidianeidad que sí habría que defender. Yo creo que el asunto se trata de ese único par antitético de los dialécticos que me convence de veras: necesidad-posibilidad. A mi forma de ver, únicamente la ciudad puede hacer posible lo que se necesita (aunque muchas veces sea ella misma lo que se necesita).Jenarohttps://www.blogger.com/profile/11228954893361529513noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-4998215284687496747.post-65922151667631711872008-10-10T19:50:00.000-07:002008-10-10T19:50:00.000-07:00Pues a mi me parece que las putas de San José son ...Pues a mi me parece que las putas de San José son el mayor logro de desarrollo que tiene nuestra capital, lo que lamento es que se estimule el turismo extranjero por encima del nacional, en eso Cartago y las demás provincias meseteñas llevan ventaja.<BR/>Ya, fuera de broma, la “clave” del asunto creo que está en esa forma que nos mandan percibirnos: somos consumidores antes que ciudadanos, aún más la manera de declarar ciudadanía es consumiendo; ya esta somera conceptualización nos lleva al asunto del espacio público y la propiedad privada. En el primero es donde las relaciones sociales en general pueden darse de manera más horizontal, mientras en la segunda empiezan los escalafones. Entonces el espacio público ideal de una ciudad, siguiendo tu rabieta de media semana, debería ser, no un espacio especializado, sino lo suficientemente flexible, ya no solo en espacio sino en oferta de “situaciones”, “actividades”, “alternativas” lo que sea; para absorber los diferentes intereses sociales. Que quiero decir, este proyecto de “embellecimiento” de San José con sus bulevares apunta solamente, o con una prioridad rigurosa, al individuo consumidor, venga y compre en un lugar bonito y entonces vemos las tensiones de las que hablás entre el comercio formal y el informal. Inclusive uno, que se ha declarado diletante de las tardes de San José y de algunas de sus noches, no vive esa ciudad, por lo menos no desde la cotidianidad que sostenés (y yo comparto) que hay que defender. La vida pura y dura, la vida trivial de los mandados y el pago de los recibos, de las cuentas de banco y el dentista, de los traguitos con amigos, El asunto es que esa vida nuestra no transcurre ahí sino en sus periferias. Lo que quiero decir y me está costando, es que los que hemos sido “expulsados” o más bien los que sin darnos cuenta nos hemos estado yendo de San José somos “nosotros”, los burgueses con pretensiones (sin que esto suene a piedras en el pecho, porque ni en mil años). Porque la ciudad claro que está viva, y hay gente que la vive, esas cantinas y cantinuchas, sodas y soduchas y esos parques, están siempre llenos con la gente que ha sabido y ha podido o no ha tenido más remedio que apropiarse de esos espacios, “nosotros” vamos de vez en cuando a tomarle una instantánea que nos de pie para seguirle un poco el pulso (el resultado siempre está trucado) a la ciudad. El problema es que no sé como salirme de las clases, y aparentemente nadie sabe, porque la forma en que se está resolviendo el asunto es, como vos decís, desplazando población y esta gente, digo los ambulantes, las putas, los indigentes hediondos, los oportunistas y los carajillos con mocos y sin miedo, sí que están defendiendo su cotidianidad, sí que intuyen orgánicamente cada calle, cada adoquín y cada policía de la ciudad. El ovillo está ahí, entre el ciudadano y el consumidor.Pelelehttps://www.blogger.com/profile/08703319863026108296noreply@blogger.com